"La Belleza," según Umberto Eco, "nunca ha sido absoluta e inmutable sino que ha adoptado distintos aspectos dependiendo del periodo histórico y país." Entonces, ¿cómo se define la belleza hoy en nuestro mundo globalizado? Quizá resulte más interesante cuestionar si nuestra sociedad aún encuentra relevancia en arribar a tal conclusión.
Ian Gillespie está convencido de que sí. Siendo fundador de Westbank, una desarrollada inmobiliaria y compañía de cultura basada en Vancouver, Gillespie ha emprendido un gran número de proyectos a través de su carrera, construyendo junto con ellos una peculiar idea de belleza que ha permeado toda nueva actividad y formado la misión de su empresa de producir resultados cada vez más complejos y enriquecedores. Proyectos como Vancouver House de BIG o Alberni by Kuma de Kengo Kuma proponen una nueva dinámica para la ciudad de Vancouver—una en la que el desarrollador ve más allá de un retorno de inversión, enfocándose en el potencial de los edificios de generar cambio social o, como escribe Bjarke Ingels en el prefacio que del libro de Westbank titulado Lucha por la Belleza "donde los edificios se ven bellos simplemente porque funcionan bellamente."
El libro ha tomado nueva forma como una exposición en Vancouver que lleva el mismo nombre y exhibe una variedad de proyectos comisionados por Westbank, así como algunos objetos de la colección de la empresa. La arquitectura, el arte y la moda se presentan en el espacio como evidencia del rol y valor de la belleza en nuestra sociedad contemporánea. "Seguido la belleza es malinterpretada, y por lo tanto descartada, como un simple gesto decorativo, un toque final o un camuflaje de lo que realmente está trabajando por debajo," escribe Gillespie en la introducción del libro. "Nosotros nunca hemos visto a la belleza como algo no esencial."
Al entrar a la exposición, el poema Lucha por la Belleza, exhibido en neon, funciona como una provocativa introducción a los visitantes. A lo largo del pabellón se encuentra el icónico bosque de vidrio escultural creado por Omer Arbel, 16.480, que se ha expandido para ocupar el largo completo de la plaza para la cual fue creada. Los "árboles" de la instalación nacen de un paisaje construido de bloques quemados de madera y formando un pabellón inmersivo que alcanza los seis metros de altura. Esta dramática pieza se presenta junto a un piano personalizado y el Butterfly Fazioli diseñado por Venelin Kokalov, Diseñador en Jefe en Bing Thom Architects, la maqueta de Rising de Zhang Han, y las linternas de Martin Boys suspendidas del techo.
A lo largo del pabellón se presentan distintas maquetas e imágenes de algunos icónicos proyectos arquitectónicos, incluyendo Alberni by Kuma, Vancouver House y el Serpentine Pavillion de BIG.
La exposición logra sumergir a sus visitantes en un ambiente que exalta el rol de la belleza en nuestras vidas cotidianas, llevando a la pregunta: ¿exactamente por qué luchamos cuando "luchamos por la belleza"? Si, como dice Eco, la belleza se define y transforma según su contexto, resulta inútil insistir sobre una concepción purista y romántica del término. La "lucha por la belleza" entonces es realmente una lucha por una nueva construcción de su definición, una que refleje un punto de vista más democrático de lo valioso más allá de la estética.
Lucha por la Belleza está abierta al público del 14 de octubre al 17 de diciembre del 2017, y se encuentra ubicada en la plaza del Fairmont Pacific Rim de Vancouver, Canadá.